La Xunta proyecta obligar a los propietarios a cortar el arbolado en los márgenes de líneas eléctricas
Unións Agrarias demanda la retirada de la medida, que supondría "nuevas cargas y obligaciones" para los afectados. El borrador de la ley de acompañamiento de los presupuestos del 2019 modificará también las distancias del arbolado a núcleo rural, parcelas agrarias y canales fluviales.
La ley de acompañamiento de los presupuestos de la Xunta para 2019 modificará la normativa sobre distancias de arbolado a infraestructuras, parcelas agrarias y viviendas. Una de las novedades radica en que la Administración obligará a los propietarios a cortar el arbolado en los márgenes de las líneas eléctricas, en concreto en los 5 metros contados “desde la proyección del conductor más externo, considerando su desviación máxima producida por el viento”, según recoge el borrador de la llamada Lei de Medidas Fiscais.
Tal disposición es criticada por Unións Agrarias, que considera que la Xunta está legislando contra los propietarios forestales, “Se introducen nuevas cargas y obligaciones para los afectados, sin ningún tipo de compensación. Lo lógico es que esos 5 metros de franja sin arbolado se expropiasen como servidumbre por parte de las compañías eléctricas”, defiende José Antonio Diéguez, de Ventonoso, un colectivo de propietarios afectados por parques eólicos ligado a Unións Agrarias.
La organización agraria cuestiona también otros cambios de la Lei de Montes que se efectuarán a través de la ley de acompañamiento de los presupuestos. “Las frondosas caducifolias tenían que mantener 15 metros de distancia con el suelo de núcleo rural, pero ahora se reduce esa limitación a 2 metros. ¿Qué pasa con todos los árboles próximos a un núcleo que se tuvieron que cortar en el último año bajo amenazas de multa?” -cuestiona el secretario de Desarrollo Rural de Unions, Jacobo Feijoo-. “Hay una clara falta de criterio, bandazos e improvisaciones”, critica.